Nave de logística Schachinger, Linz | Austria
En este proyecto surgió la idea y el desafío de construir un edificio de logística vanguardista que prestaría una atención nunca vista a la ecología de construcción y a la eficiencia energética. Con la nueva construcción erigida en 2013 fue posible cumplir estos requerimientos del propietario. El resultado fue una novedad arquitectónica en el ramo de la logística, llevado a la práctica en un concepto de construcción realizada en madera desde el techo a la fachada, pasando por las estructuras de pared, con un suministro de energía proveniente de las aguas subterráneas y un uso de materiales de construcción ecológicos en su mayor parte.
La totalidad de la construcción portante principal del edificio se erigió en forma de armazón de madera, en el que unos soportes cruciformes constituyen la construcción portante vertical y otros soportes de madera laminada encolada la horizontal. Como elementos creadores de espacio se utilizan módulos de pared y techo prefabricados con placas de madera con aislamiento interior de lana de vidrio. El código de barras como componente más importante de la logística se convirtió en tema arquitectónico para el diseño de la fachada. Así, unos listones de madera de abeto blanco generaron una óptica de código de barras en la fachada en contraste con espacios intermedios oscuros.
hechos
Proyecto Nave de logística y edificio de oficinas
Localidad Linz (Austria)
Año de construcción 2013
Propietario Schachinger Logistik
Arquitectura Poppe*Prehal Architekten
Estática Krückl-Seidel-Mayr & Partner
La realización
El tiempo de planificación y construcción para el edificio de logística se determinó de manera muy ajustada. Dado que la fecha de entrega ya estaba fijada, todo el equipo se vio sometido al apremio del tiempo. Cinco meses de construcción tenían que ser suficientes para completar la nave de más de 10 900 m² y la oficina de más de 800 m². ¡Los plazos se cumplieron! A diferencia de las naves de almacenamiento convencionales, para este proyecto se planteó el objetivo expreso de construir un edificio con una alta calidad como lugar de trabajo. Los radiantes matices de colores amarillo, verde y rojo confieren al interior casi la atmósfera de un salón. El concepto general del color en el ala de oficinas y en la nave de almacenamiento se elaboró siguiendo las reglas del Feng Shui y ejercería un efecto positivo sobre el bienestar de los empleados.
Protección contra incendios
Cumplir los requisitos de protección contra incendios fue en la práctica menos complicado de lo que se suponía. El equipo de arquitectos elaboró un concepto de protección contra incendios en colaboración con el "IBS - Institut für Brandschutztechnik und Sicherheitsforschung" de Linz. Toda la nave está concebida como sector protegido contra incendios y está provista de un sistema de aspersores que le ofrecen protección total. La caja de escalera fue diseñada y realizada como sector protegido contra incendios independiente. Gracias a las soluciones inteligentes de construcción en madera y al aprovechamiento máximo de las normas de protección contra incendios fue posible reducir al mínimo el uso de hormigón. El único elemento superficial fabricado con piezas acabadas de hormigón es una pared cortafuegos que separa el edificio del almacén de estanterías altas ya existente.
Ecología y costes de construcción
Cuando se presta tanta atención a la ecología se cuestiona inevitablemente la relación coste-rentabilidad. El resultado sorprende: los costes añadidos solo superan en un escaso porcentaje los de una nave de construcción convencional y se mantienen dentro de los límites establecidos. Teniendo en cuenta el enorme salto de calidad y los costes operativos considerablemente más bajos, los costes añadidos se amortizan en unos pocos años. Se han obtenido datos comparativos de una nave de construcción convencional construida hace cinco años en Linz-Hörsching. Si se hace un cómputo aproximado de los costes de aquel momento llevado al nivel de precios actual, se obtienen unos costes añadidos de entre el 3 % y el 5 %. Sin embargo, para realizar una comparativa se deberían tener en cuenta los costes operativos, que en caso de las naves convencionales son considerablemente más altos. Aquí, el potencial de ahorro es cercano a un tercio, de modo que los costes añadidos se amortizan en unos pocos años. Este balance muestra que la combinación entre viabilidad y asequibilidad marca la pauta de este proyecto orientado al futuro.
Fotos: © Walter Ebenhofer
